Y ahora, hablemos de cosas que no entiendo. Como el matrimonio. El de mis papás. Mis papás que llevan treinta y mil años de casados. Que de repente se gritan y me espanto como cuando abrazar ositos servía de algo. Que de repente hacen que me den ganas de zapearlos. Mis jefes.
Dicen que soy como mi mamá. Ok. No. Digo que soy como mi mamá y me apanico. Y es que creo que uno debería tener al lado alguien a quien admire y no sólo estar con alguien que daría la vida por una. De ahí que sea tan complicado para mí todo este asunto. Madre se desespera porque padre está bien menso. Y ella está bien sorda. Y yo no entiendo nada.
Pff y es que aparentemente la admiración no basta. Y pa'l caso, tampoco el amar al otro como pendeja basta. Eso sí me cae. No sé, me gustaría estar con alguien por los motivos correctos. Todavía no sé precisamente cuáles, pero por los correctos.
Y esperaba que me quedara todo más claro viendo las letras negras sobre el fondo blanco. Llevo un buen rato pensando y bien poco escrito.... Y es que nos falta vida, corazón.
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